lunes, agosto 08, 2005

Madre

Guardo en lo más profundo de mi ser cada segundo que dedicaste a ayudarme..Aquellos desayunos que me preparabas y que tan sigilosamente me traías a la habitación cuando yo intentaba hacer mi carrera..Cada instante empleado en animarme cuando me veías vencido y tu afán porque no tirara la toalla..(Al final lo conseguimos..Los dos...).La paciencia que demostrabas conmigo cuando pasaba por alguna etapa complicada y me encerraba en mi mismo..La gran herida de no haber sabido tener en ti una amiga y no haber tenido la suficiente confianza para hablar contigo de mis cosas (Sabes? Aunque el tiempo perdido no se recupera, nunca es tarde. Y la próxima oportunidad no pienso desaprovecharla..).. El dolor de cada segundo de sufrimiento que te he causado..El gran sacrificio para sacarnos adelante a mis tres hermanos y a mi, mientras papá se dedicaba a trabajar durante casi todo el día..Tu forma de querernos y de hacerte querer..Tus besos, tus abrazos y tu sonrisa, tan bonita como contagiosa.. Tus ojos negros y tu lengua de trapo..Las lecciones que me das de un tiempo a esta parte y cada ocasión en la que insistes en lo mucho que te estoy ayudando estando cerca de ti..Mis motivos para celebrar lo bien que nos llevamos actualmente (quien nos lo iba a decir verdad?)..Los mismos por los que reconozco que lo poco que soy te lo debo a ti.. Los mismos que me hacen sentir que te quiero..Sobretodo y ante todo, porque nadie, absolutamente nadie, me quiere como lo haces tú..Que cumplas muchos más Madre..

4 comentarios:

  1. Pocas veces escribo en los comentarios pero queria decirte que tus palabras me han encantado, ojala pudiese yo sentir por los mios lo que tu por tu madre. Te envidio.

    Un saludo

    ResponderEliminar
  2. Anónimo12:46 a. m.

    Sólo te digo que si yo fuera una madre también querría un hijo así... Sencillamente encantador. ;)

    Besos.

    ResponderEliminar
  3. Anónimo6:00 p. m.

    Si no lo has hecho, deberías regalarle esa carta...no crees?

    ResponderEliminar
  4. Anónimo3:56 a. m.

    Somos los hijos tantas veces los que no podemos confiar en nuestros padres como amigos, porque creemos que por ser diferentes por fuera, no pueden sentir como nosotros, te lo digo como madre que a veces descubro eso en mis hijos y me sorprende que me vean como una vieja que a la mejor no entiende
    tengo 46 años y creo que ellos me ven de 66, aun si asi fuese, sabria y trataria de entender,por mas complicado que pueda ser no creo que sea mas complicado que mi vida
    y mi mundo interior, quien mas que yo podra enterder con tanto amor y hacer hasta lo imposible por ayudar o llorar con ellos?. En tu caso por ti.... tu madre. Dicelo no esperes a que ya no este.

    ResponderEliminar